martes, 16 de mayo de 2017

vino a Comala y lo vio todo: 100 años

http://palabravirtual.com/index.php?ir=ver_voz1.php&wid=3370&p=Juan+Rulfo&t=Diles+que+no+me+maten&o=Juan+Rulfo


Cuando conocí al hijo de Juan Rulfo, a Juan Carlos Rulfo, francamente sentí  que la fortuna y el nirvana eran esos espacios en los que podemos conectarnos con el amor a la entrañable vena de la raíz de un ser humano. Y recordar este encuentro con Juan Carlos en Valle de Bravo me llena de una vitalidad que ellos sé que portan: los  Rulfo son de un corazón que te deja colmado de la invisible vena de raíz, venero de agua y luz... Los cien años del padre de Juan Carlos son el vivo reflejo que hay en los ojos de su hijo. Saber que  nos queda este aliento en este lugar, en este Valle  de esperanza y sueños, a quienes sabemos que la vida de nuestra literatura mexicana tiene un nombre que es solamente este nombre: Juan Rulfo, el Jefe como le dice su hijo Juan.

miércoles, 1 de marzo de 2017

la tribu del poeta

http://www.palabravirtual.com/index.php?ir=ver_video2.php&wid=211&t=Mi+tribu&p=Alberto+Blanco&o=Alberto+Blanco

En mi bitácora de los días desde "agua fría", arrullo y sostengo este anhelo. Ojalá que los jóvenes que leen poesía lleguen a tiempo a su tribu, den su palabra y con ello sean sus días más verdaderos y  reales, y cuando tengan que cuestionar a sus maestros sepan que la verdad es una, que la verdad es un estado de conciencia no de opinión sobre  los que te gusta o disgusta. La palabra es la tribu misma alentarla con palabras agua y amor.


domingo, 25 de diciembre de 2016

postal del día 25

Postal para habitar la luz

 
Salimos de la oscuridad, la casa del agua quedó atrás, entramos en el espacio de la luz. Habitar la luz es ver, contemplar, mirar a luz. Habitar el espacio de la luz es una postal instantánea para reconocer que a través de esta ventana a traviesa la vida. 


Postal para descansar

 
Desde el espacio concentrado de un pequeña casita vallesana, la ventana es sólo un instante de luz, las bombillas son  la luz de estos días, donde leer es descansar de lo no leído o mirado.
La concentración de esta mirada nómada descansa en las páginas de Frabeuf.


Postal para el asombro

 
Esta hermosa azulada magen postal me la ha enviado Yuji san, mi ex compañero de piso en la bella SantaMaría la Rivera, donde compartimos días muy "monos" corría el año del 2005, cuando el año mono fue de madera y no de fuego como ahora en 2016, donde la quemazón fue tremenda pero purificadora. Yuji san dice que esta imagen tiene el paisaje que mas le gusta: el Fuji, el arbolito del cielo (el edificio alargado) y el río... que la tomó desde el bus. Japón tiene estas cosas y a estos seres. Nadie se puede perder la vista del sol naciente en su natal ciudad: Japón. La mirada es una y otro postal, tienes todo el horizonte en un instante, templos y arbolitos del cielo en una sola visión, puentes y ríos, metro veloz y librerías gigantes en cada esquina, seres pacíficos y veloces, todos corren corren pero si saben a donde van. Mirada nómada se transforma en postal.





viernes, 16 de diciembre de 2016

Postales de mis días

Postal primera
La empedrada y empinada calle que lleva a mi nueva casa, en el camino media montañiata y en ella como manos de pétalos verdes incrustados en las rocas: unas fosfórescentes plantas carnívoras y en la entrada a la casa tres rocas gigantes simulan una fuente.
Desde esta coordenada nómada; una mirada para ti.

confesar que he caminado este viaje inmóvil aún

Muro de la confesión. 1. Extrañar mis pasos perdidos en estas calles ateridas. Ya no camino por sus orillas, me pierdo en la vigilia de mi c...