miércoles, 23 de septiembre de 2009

Lianas y lienzos con poemas para colgar.

Poema para colgar
(intercambiable por una pintura)










Saltar, saltar,
el columpio llegó al parque
somos unos monos lindos
que se miran a si mismos
mirándose
el pequeño mono me mira

quiere decirme algoque se le olvida.
Yo no olvido,
desde la banca de mi cuerpo
recibo las hojas
paz, compasión: ecuamimidad emotiva
en una bolsa pequeña (bolsa para llevar)
y columpiar -como mona-
en alguna rama cercana,
liana colgante
hacia España
cuelgo

en el marco de un pintor que a su vez
se metió al marco con todo y pintura,
donde veo la mancha del
del poema que es una pintura sin voz.
(A Santiago Munitiz, danzante vajra)







sábado, 12 de septiembre de 2009

Pablo Neruda y los pájaros (voz)

Poema en audio: El poeta se despide de los pájaros de Pablo Neruda por Pablo Neruda

El poeta se despide de los pájaros

Poeta provinciano,
pajarero,
vengo y voy por el mundo,
desarmado,
sin otrosí, silbando,
sometido
al sol y su certeza,
a la lluvia, a su idioma de violín,
a la sílaba fría de la ráfaga.

Sí sí sí sí sí sí,
soy un desesperado pajarero,
no puedo corregirme
y aunque no me conviden
los pájaros a la enramada,
al cielo
o al océano,
a su conversación, a su banquete,
yo me invito a mí mismo
y los acecho
sin prejuicio ninguno:
jilgueros amarillos,
tordos negros,
oscuros cormoranes pescadores
o metálicos mirlos,
ruiseñores,
vibrantes colibríes,
codornices,
águilas inherentes
a los montes de Chile,
loicas de pecho puro
y sanguinario,
cóndores iracundos
y zorzales,
peucos inmóviles, colgados del cielo,
diucas que me educaron con su trino,
pájaros de la miel y del forraje,
del terciopelo azul o la blancura,
pájaros por la espuma coronados
o simplemente vestidos de arena,
pájaros pensativos que interrogan
la tierra y picotean su secreto
o atacan la corteza del gigante
o abren el corazón de la madera
o construyen con paja, greda y lluvia
la casa del amor y del aroma
o jardineros suaves
o ladrones
o inventores azules de la música
o tácitos testigos de la aurora.

Yo, poeta
popular, provinciano, pajarero,
fui por el mundo buscando la vida:
pájaro a pájaro conocí la tierra;
reconocí dónde volaba el fuego:
la precipitación de la energía
y mi desinterés quedo premiado
porque aunque nadie me pagó por eso
recibí aquellas alas en el alma
y la inmovilidad no me detuvo.

De: Una casa en la arena, (1956-1966)
PABLO NERUDA

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